sábado, 30 de mayo de 2015

30-05-03: Bonifacio Martín Hernando y Julián Embid Luna

Como cada varias semanas, habían acudido a la localidad de Sangüesa tres policías nacionales para facilitar a los vecinos la renovación del DNI, evitando el desplazamiento de los mismos a la capital navarra. Para que los vecinos pudieran pedir cita, la fecha de la visita era anunciada públicamente con días de antelación. Tras terminar el trabajo de la mañana, los agentes se dirigieron al coche para regresar a Pamplona y al accionar el contacto del coche, hizo explosión una potente bomba lapa en los bajos que acabó con la vida de Bonifacio y Julián. Ambos agentes estaban casados y tenían dos hijos. El tercer agente, Ramón Rodríguez Fernández, salvó su vida al no encontrarse en el interior del vehículo aun que quedó herido de gravedad en los miembros inferiores, abdomen y tórax. También resultó herido de gravedad un empleado de telefónica que pasaba por el lugar, así como también hubo decenas de heridos leves que se encontraban en una plaza cercana.

A dia de hoy sigue sin saberse quien acabo con la vida de Bonifacio y Julián.

30-05-1985: Alfredo Aguirre Belascoáin y Francisco Miguel Sánchez

Poco antes de las 21:30 de la noche se recibió una llamada en el 091 de Pamplona avisar de la agresión de un drogadicto a su madre. Cuando llegaron los coches zeta de la Policía Nacional al lugar, hizo explosión una bomba escondida dentro de una bolsa de basura junto a una farmacia. En el momento de la explosión Alfredo, que acababa de dejar su bicicleta, estaba llamando por el telefonillo a el domicilio de una vecina donde se encontraba su madre. El niño fue alcanzado de lleno y murió en el acto a la pronta edad de 13 años. En el coche de policía resultó herido de gravedad Francisco Miguel Sanchez y fue trasladado al hospital junto con sus otros tres compañeros. Francisco falleció nada mas ingresar en el hospital debido a la importancia de las heridas.

La bomba había sido colocada poco antes por Mercedes Galdós Arsuaga simulando ser una mujer embarazada. En 1987 la Audiencia Nacional condenó a Mercedes Galdós Arsuaga, Juan José Legorburu Guerediaga y José Ramón Artola Santiesteban como autores del atentado por el cual les fueron impuestas penas de 85 años de cárcel.





viernes, 29 de mayo de 2015

jueves, 28 de mayo de 2015

28-05-1983: Antonio Conejo Salguero y Fidel Aparicio

Aquella mañana Antonio y Fidel se encontraban en el interior del edificio de Correos en el Paseo de Sarasate de Pamplona. Se encargaban de la seguridad del mismo tres guardias civiles, dos de ellos en la zona pública y el otro situado en una garita blindada del interior. Entonces dos terroristas entraron en el edificio y en cuanto se encontraron a un metro de ambos guardias civiles, sacaron sendos revólveres y realizaron 12 disparos, sin que el tercer guardia civil pudiese reaccionar. En medio del pánico provocado por el tiroteo, los pistoleros huyeron con total tranquilidad. Ambos agentes fueron trasladados rápidamente al hospital pero ingresaron ya cadáveres. Antonio tenía 41 años, estaba casado y tenía dos hijas. Fidel tenía 48 años y estaba soltero en el momento de su asesinato.

A los pocos minutos de producirse el atentado, varias personas que se habían acercado al lugar de los hechos pusieron una bandera de España y dos ramos de flores en el lugar del asesinato. Nunca se supo quienes fueron los autores del atentado, aun que los Comandos Autónomos Anticapitalistas lo revindicaron. Judicialmente ha quedado impune.



miércoles, 27 de mayo de 2015

27-05-1984: José Luis Ollo Ochoa

El capitán, jefe del cuartel de la Guardia Civil en Aóiz, había acudido ese domingo a su piso en el barrio de La Chantrea de Pamplona. A las 8 de la tarde abandonó la casa junto a su mujer para regresar de nuevo a su localidad de destino, al poner en marcha el vehículo la vibración del mismo activó una potente bomba colocada en los bajos del coche, matando en el acto a Luis que quedó atrapado en el amasijo de hierros en el que se convirtió su coche. Luis, natural de Ochagavía, tenía 54 años en el momento de su muerte, estaba casado y tenía dos hijas. Su mujer Esther, que estaba en el exterior del vehículo resultó herida de gravedad y fue lanzada a varios metros, aun así tuvo fuerzas para levantarse y gritar: “¡Me han matado a mi marido! ¡Me han matado a mi marido!” posteriormente fue trasladada a la unidad de vigilancia intensiva del hospital Virgen del Camino.  

Por este atentado fueron condenados a penas de prisión como autores materiales los terroristas: Juan José Legorburu Guerediaga, Jesus Jimenez Zurbano, Jesus María Altable Echarte, Miguel Santiago Izpurua García. También fué condenado Javier Martínez Nogales como complice. Finalmente, en 2005 fue condenado José Javier Zabaleta Elosegui por ordenar el atentado. Presuntamente la etarra Mercedes Galdós Arsuaga participo también en el atentado.


lunes, 25 de mayo de 2015

Navarra está en peligro, y se defiende en la calle


Las elecciones no nos importan, porque aquí no hacemos política. Aquí hacemos NAVARRA, y por eso mismo vemos qué ha pasado este domingo de mayo de 2015: no hay una respuesta política clara a la gran pregunta, “¿qué pasará con Navarra ahora?”.

Con el nuevo Parlamento, nadie tiene mayoría para gobernar. Tardarán mucho en montar un Gobierno de coalición (o quizás no) y cuando lo hagan habrá que estar seguros de que no tiene dentro ninguna fuerza abertzale o pro-abertzale. Y eso es ahora mismo más que complicado. Sin embargo, es lo que más del 75% de los navarros, vote a quien vote, prefiere, desea y defenderá.

Con Bildu en las instituciones y muchos dispuestos a pactar con Bildu o a hacer su política para ganar su confianza, Navarra está en peligro. Como dijo hace ya bastantes años un presidente de Navarra, "Fuero y libertad, Navarra no es negociable", y el mismo Miguel Sanz poco antes explicó eso diciendo: “lo que queremos oír es que el PSN no pactará con partidos soberanistas”.

Los partidos y los votos no bastan para defender Navarra. Si los políticos negocian Navarra y España con la ETA, si hay aún transitoria cuarta, si etarras condenados con miles de años de cárcel pendientes salen a la calle, no podemos estar tranquilos. Porque el precio que piden siempre los abertzales es Navarra y la destrucción de España. Y eso es lo que aquí, sin importar izquierdas o derechas, defendemos.

El 17 de marzo de 2007, ante la negociación de los socialistas con la ETA y los demás abertzales, una inmensa manifestación llena de banderas de España salió a la calle en Pamplona. En los días anteriores, Pamplona y toda Navarra se llenaron de carteles, de pegatinas y de pintadas. Y aquel día los navarros españolistas eran tantos que hasta los políticos más tibios y dialogantes tuvieron que manifestarse. El presidente de Navarra, Miguel Sanz presidió la manifestación al grito de "Viva Navarra foral y española".

¿Qué quería ETA desde que se fundó y desde que ha tenido un brazo político, Batasuna, Sortu o Bildu? La alternativa KAS, es decir la amnistía de sus presos, la autodeterminación de toda su ´Euskal Herria´ con Navarra y el poder en ella para construir un régimen totalitario.

Ahora en 2015, como en 2007 y como siempre, nuestro sitio está en la calle. Recordemos a los navarros que somos mayoría. Recordemos a los políticos que no todo vale. Recordemos a los etarras que Navarra no es para ellos. Sólo podemos aceptar pactos entre partidos si aceptan estas condiciones. Por Navarra y por España.

lunes, 18 de mayo de 2015

El escudo de Navarra


Los abertzales y quienes los siguen consiguen que todo se convierta en polémica. Lo han logrado incluso con algo que debería unir a todos los navarros, como es el escudo de Navarra. Ya hicieron algo parecido, a menor escala, en la Transición, cuando impusieron que oficialmente se dejase de usar la condecoración de la Laureada de San Fernando. Ahora, cuando parecía olvidado aquel período de división, vuelven al ataque. Esta vez, contra las cadenas.

La historia es bastante sencilla, aunque ellos no la conocen, y de paso demuestran que poco saben de heráldica. Lo primero que hay que saber es que los escudos no empiezan a ser usados como símbolos hasta el siglo XII, y establemente más bien desde el XIII. De todos modos, no hay ni Rey ni Reino de Navarra hasta 1162 con Sancho VI, y casi desde el principio (y probablemente antes) el color heráldico usado quera ya entonces el rojo (gules).

Era costumbre entonces representar los escudos como eran en la realidad de las armas, es decir con un refuerzo metálico que los hiciese más sólidos ante los golpes. Por eso muchos escudos de los más antiguos se representaron con esa estructura en forma de borde, cruz y aspa (carbunclo y bloca), sobre sus colores. Así nace la idea de un escudo de Navarra completamente rojo (gules) con una figura metálica sobre él (el carbunclo, en oro).


¿Ah, pero no eran las cadenas? Pues no, la verdad es que no. Es totalmente cierto que Sancho VII el Fuerte estuvo en la gran batalla de la Reconquista nacional en 1212, pero su gesta patriótica allí no dio lugar a cambios en los símbolos del Rey ni del Reino. Cada Rey solía tener un signo o dibujo para cerrar sus documentos (por ejemplo, un águila negra, que sí fue signo en este tiempo… pero NUNCA figura de escudo ni mucho menos de bandera). Cada Rey, como los obispos, las ciudades y muchos nobles, solía tener además un sello de cera para lo mismo. Cada Rey lleva como vemos su escudo a la batalla, que pronto se empiezan a heredar en las familias (dando lugar a una heráldica organizada) y lentamente a identificar con el Reino (pero muy lentamente). Así aparece en el Libro de Armería del Reino.


La idea de que fuesen cadenas lo representado en el escudo de Navarra y que esas “cadenas” fuesen vinculadas a las Navas vino mucho más tarde en la Edad Media, cuando se olvidó qué era la bloca, y se pensó que ese dibujo sobre el escudo de Navarra podía venir de las Navas. Uno de los que difundieron esa idea fue el mismo Príncipe de Viana.

De todos modos nunca hubo un “diseño oficial” de escudo. Cada Rey usó el que quiso. Los Champaña primero y los Evreux después usaron el escudo de Navarra mezclado con el de su familia, y luego con el de sus otras posesiones fuera de España. Los mismo hicieron los Albret hasta que perdieron el trono en 1512, y también después. Como los Borbón siguieron presumiendo de ser “reyes de Navarra”, mezclaron el escudo navarro con el de Francia, y así hasta Luis XVI.

Al unirse permanentemente Navarra a la Corona de Castilla en las Cortes de Burgos de 1513, el escudo de Navarra (rojo y con “cadenas” siempre) aparece en los escudos de los Reyes de España cuando se representa en Navarra, pero no fuera de ella salvo excepciones. Ya en esos siglos XVI, XVII y XVIII hay una idea popular de que el escudo es símbolo de toda Navarra (aunque había nacido para representar a los Reyes sólo) y de que lo representado son unas cadenas sobre fondo rojo, con una esmeralda en la intersección central y con la corona real sobre el todo (corona que va cambiando según los reyes, dinastías y épocas).

Tras muchos experimentos y variantes, el escudo de Navarra figura en el nacional de España desde la época liberal, y decididamente desde la I República. En Navarra, la forma tradicional se define en 1910 tal y como la conocemos ahora, y a la vez se inventa algo que jamás había existido antes, la bandera de Navarra. Un poco después, los nacionalistas vascos “anexionaron” Navarra en sus sueños heráldicos, con un pretendido e inventado escudo de Euskadi de seis o cuatro partes, según gustos.

¿Cuál es la conclusión? Que desde antes de las Navas el escudo de los Reyes y luego de Navarra es rojo. Que hasta el siglo XX no hubo bandera de Navarra. Que jamás hubo “arrano beltza” como símbolo más que personal y familiar de algunos reyes, y nunca en escudo o bandera. Y que en la mente popular, y luego en la idealización de todos, poco a poco esa figura medieval del carbunclo y la bloca se ha ido convirtiendo en “cadenas”. ¿Queremos volver atrás cinco siglos, usando como los abertzales ahora un escudo con carbunclo y sin corona? Que así sea, pero para todo. Si no, el símbolo que une a todos los navarros, además de la bandera nacional, es un escudo rojo con cadenas y corona, y mucho más reciente una bandera roja con ese escudo. Y nada más, y nada menos, por mucho que moleste.

Caius

sábado, 16 de mayo de 2015

16-05-1980: Francisco Ruiz Hernández y Francisco Puig Maestre

Ambos guardias civiles cenaban habitualmente en el bar Huici de Goizueta y un vecino del pueblo pasó la información a miembros del grupo Adarra de ETA, formado por vecinos del pueblo de Hernani. Ese día, el informador entró al bar para comprobar la posición exacta de los agentes, a continuación, dos etarras encapuchados entraron en el comedor desde la cocina y ametrallaron a muy corta distancia a los dos guardias civiles causándoles la muerte. Francisco Ruiz estaba soltero y Francisco Puig se hallaba casado y con dos hijos de corta edad.    

En 1981 fueron condenados José María Aramburu Lete y Juan Miguel Apecechea Arocena a sendas penas de 25 años de cárcel por su colaboración en este atentado. En 1985 fue condenado como autor material Francisco Javier Lujambio Galdeano a 54 años de cárcel.


sábado, 9 de mayo de 2015

09-05-1978: Manuel López González

El Guardia Civil volvía de un servicio en la estación de RENFE en Pamplona junto con otros cuatro compañeros cuando a su paso por El Puente Nuevo en la Taconera de Pamplona fueron alcanzados por una bomba colocada en una farola, resultando herido de gravedad junto con otros dos guardias civiles, uno de ellos su hermano. Finalmente Manuel murió por la gravedad de las heridas en el Hospital de Navarra con tal solo 23 años de edad y tan solo a un mes de casarse. Tras el funeral se produjo una manifestación de repulsa que fue increpada de forma violenta por un grupo de abertzales en las calles de Pamplona. A día de hoy se desconoce la autoría del atentado.

miércoles, 6 de mayo de 2015

06-05-1998 Tomás Caballero Pastor

Como todos los días desde que tomó posesión de su cargo como portavoz de UPN en el ayuntamiento de Pamplona, Tomás se dirigía al ayuntamiento para realizar su trabajo. Tomás acababa de poner en marcha el vehículo e iba acompañado por una vecina que habitualmente acercaba a su puesto de trabajo en el centro de Pamplona, cuando dos etarras tirotearon su coche alcanzándole dos veces. Tras los disparos, dos terroristas huyeron en direcciones opuestas. Su hijo, que oyó los disparos desde su casa, avisó a la policía y bajo para intentar atender a su padre, que fue trasladado al Hospital de Navarra, falleciendo una hora después debido a la gravedad de sus heridas. Tomás estaba casado y era padre de 5 hijos.

El día que ETA asesinó a José Ignacio Iruretagoyena, el 9 de enero de ese mismo año, los miembros de Herri Batasuna del consistorio pamplonés se negaron a condenar el crimen, con lo que Tomás Caballero les dijo: “Debemos plantar cara no solo a los asesinos, si no a quienes les jalean, les apoyan y nunca les condenan. Me estoy refiriendo a los miembros de HB” Por estas y otras declaraciones HB se intentó querellar por injurias contra Tomás, causa que no prosperó, ante esto el diario Egin publica su fotografía señalándolo de facto un mes antes de su asesinato.

Por el asesinato de Tomás la audiencia nacional condenó a 30 años de prisión a los etarras Francisco Javier Ruiz Romero, Mikel Javier Ayensa Laborda y Alberto Viedma Morillas.



martes, 5 de mayo de 2015

El himno del Club Atlético Osasuna

Son muchos los equipos de fútbol en los que se entona un himno antes de los partidos, es más, se podría decir que hasta ese equipo de nuestro lejano pueblo, tiene un himno. En el caso de Osasuna, tenemos un himno cuya letra menciona todos los aspectos de Navarra, desde el norte hasta la ribera, todo esto en una jota compuesta por Manuel Turrillas o "Maestro Turrillas" como algunos le llamaban.

Manuel Turrillas fue un compositor, conocido por componer canciones para "La Pamplonesa" banda a la que él pertenecía y canciones para las peñas. De Manuel Turrillas también es la famosa canción que los mozos cantan antes del encierro, "A San Fermín pedimos..." compuesta por él mismo y con letra de Joaquín Zabalza.

Como ya he mencionado antes, el himno de Osasuna menciona aspectos de toda Navarra, demostrando así, la diversidad de nuestra tierra y el apoyo al equipo de nuestra capital. Hoy en día, el himno de Osasuna está presente al inicio y a la hora de finalizar los partidos disputados en El Sadar, presenciando así, momentos tristes como son los descensos que hemos sufrido, o tambíen momentos alegres, como la llegada a semifinales de la UEFA, derrotas a grandes equipos o incluso la clasificación para la final de la Copa del Rey. Desde aquí deseamos que se siga escuchando el himno, sea en la categoría que sea, pero que nuestro equipo siga estando a pie del cañón y demostrando su aire de equipo noble que siempre hemos tenido.



El "once" de Osasuna, valiente
y luchador defiende
sus colores con brío arrollador
y por eso los hinchas le gritan sin cesar: Osasuna
¡aúpa! que tú sabes triunfar.

De tu blusa y tu bandera, fuerte y rojo es el color de
tu blusa y tu bandera,
como el roble montañés y el vino de la ribera vibra
en ti Navarra entera
en donde quiera que estés.

Artistas en el juego, dominan el balón derrochan
valentía y luchan con tesón
y el público entusiasta así suele gritar: Osasuna
¡aúpa! que tú sabes triunfar.

De tu blusa y tu bandera, fuerte y rojo es el color de
tu blusa y tu bandera,
como el roble montañés y el vino de la ribera vibra
en ti Navarra entera
en donde quiera que estés.

Osasuna valiente, no dejes de luchar que Navarra te
admira porque sabes jugar.
Osasuna valiente, juega con ilusión que jugando y
venciendo tú serás campeón.

lunes, 4 de mayo de 2015

Escudo y bandera de Pamplona


La actual bandera y escudo de Pamplona tienen su origen en el año 1423 y se deben al Privilegio de la Unión dictado por el rey navarro Carlos III en el que son designadas las especificaciones del pendón de Pamplona.

Según este documento, los burgos en los que se encontraba dividida Pamplona pasarían a ser unificados en una sola ciudad. Hasta por aquel entonces Pamplona había estado dividida en tres poblaciones diferenciadas -Navarrería, San Cernin y San Nicolás- con su propia organización, fueros, impuestos... y murallas con sus torres defensivas, no sólo hacia el exterior de la ciudad sino hacia el interior de la misma; dado que las peleas, saqueos, escaramuzas y guerras entre los diferentes burgos eran continuas, a pesar de tratarse de poblaciones colindantes.

Escudos de armas de los burgos de la Navarrería, San Cernin y San Nicolás.

Así, cada uno de estos burgos tenía sus propios símbolos, es decir signo para los documentos, sello y contrasello en cera para los mismos, escudo y pendón, pero estas poblaciones durante el reinado de Carlos III el noble estaban llamadas a ser de nuevo una sola ciudad bajo un mismo escudo de armas. Con el ánimo de acabar con los enfrentamientos entre los diferentes Burgos, dicho rey otorga a la ciudad en 1423 el ya mencionado Privilegio de la Unión, por el que estas poblaciones se irán despojando de sus murallas internas y se unirán bajo un mismo pendón y ayuntamiento, en la ciudad actual de Pamplona. De hecho, la Casa Consistorial se situó entre los tres Burgos.

En clave política podemos destacar dos hechos: que este documento tan relevante está escrito en romance navarro y no en euskera y que define las armas de Navarra como cadenas de oro sobre un campo de gules. Esto se carga de un plumazo los ridículos postulados nacionalistas que afirman que a partir de 1512 son los castellanos los responsables de arrinconar el euskera e imponer las cadenas como una forma de "españolizar" el escudo de Navarra. Nada más lejos de la realidad: el idioma de la Corte Navarra era desde los siglos XIII-XIV el romance navarro (idioma que contribuye a la mezcla dialectal que forma el castellano) y como podemos ver, casi un siglo antes de la invasión castellana de 1512 ya había reyes navarros que usaban las cadenas doradas en el escudo de armas del reino de Navarra. Aquí un extracto relevante de este tratado en su idioma original:

"Todo el dicto pueblo de nuestra dicta Muy Noble Ciutat de Pomplona, unido como dicto es, aya a auer un sieillo grant et otro menor para contra sieillo. Et un pendon de unas mesmas armas, de las quolles el campo sera de azur; et en medio aura un leon pasant, que sera dargent; et aura la lengoa et huynnas de gulean. Et alrededor del dicto pendon aura un renc de nuestras armas de Nauarra, de que el campo sera de gulean et la cadena que yra alrededor, de oro. Et sobre el dicto león, en la endrecha de su exquina, aura en el dicto campo del dicto pendon una corona real de oro, en senyal que los reyes de Nauarra suelen et deuen ser coronados en la eglesia Cathedral de Santa Maria de nuestra dicta Muy Noble Ciudad de Pomplona."

Como podemos ver, este documento define de forma clara, completa y detallada el nuevo pendón que representaría a la ciudad de Pamplona, con forma de blasón heráldico que ocuparía toda la bandera. Es probable que el monarca Carlos III eligiese el color azul como símbolo heráldico de la "templanza y la dulzura", dado que este nuevo símbolo cierra un periodo negro de la historia de la ciudad.


Se tiene constancia de banderas utilizadas tardíamente durante este mismo siglo XV, tenían un fondo verde (sinople), circunstancia de la que se desconoce exactamente la motivación, pero que se aventura que podía deberse al deterioro de un fondo azul original que tornando en verde. Esta circunstancia es relativamente normal en la heráldica medieval, una evolución verosímil. No se trata en cambio de una forma de homenaje a la casa de Evreux que por aquel entonces reinaba en Navarra, dado que al fin y al cabo sus armas (usadas a menudo junto a las navarras) incluyen el gules, el plata y el azur, pero no el sinople).

Por este mismo motivo, durante el siglo XVIII es adoptada una nueva bandera con un fondo blanco, en este caso en homenaje a la casa de Borbón que reinaba en España. Otra versión de esta misma bandera es blanca con girones azules, sobre la que se sitúa el escudo de armas de la ciudad, fue utilizada hasta finales de la Dictadura de Primo de Rivera.


Finalmente, a mediados de los años 20 el consistorio pamplonés empezó a valorar, no sin reticencias, el cambiar el paño de la bandera a color verde dado que según el libro de autos del Regimiento, las dos primeras banderas de la ciudad habían sido verdes. Será en el año 1930 cuando será adoptada de forma definitiva la bandera de fondo verde que hasta la actualidad representa Pamplona. Como se puede ver, con las cadenas y colores de Navarra, y de disposición moderna.