Páginas

viernes, 3 de julio de 2015

Como una Veleta: Bildu olvida las peñas que no le gustan


Lanzan el Chupinazo de los primeros Sanfermines de Joseba Asiron…. los que ha querido el nuevo alcalde, Joseba Asiron. Perfecto. Pero por el camino el líder de Bildu – Batasuna nos ha demostrado que no conoce Pamplona, ni su historia, y que se la inventa según le va conviniendo. ¿Pero son fiestas o va a ser sólo su propaganda política?

Asiron dio el chupinazo de 2015 a la memoria de la Peña La Veleta y al Orfeón Pamplonés. No hay dudas en el Orfeón, que cumple su primer siglo y medio y que nombró sin dificultades al cantante Javier Aranegui Huarte. ¿Pero qué sabe y no sabe Asirón de la Peña La Veleta?

La Veleta se fundó en 1930. Integrantes de la Peña impulsaron en los años 30 del siglo XX la indumentaria blanca y roja (que ya se ve que no es “milenaria”, pero que se ha convertido en estas décadas en la habitual durante las fiestas). Y Asirón ha designado en “memoria” de La Veleta a Chantal Estrada, nieta de uno de los miembros de la peña La Veleta antes de la Guerra Civil, y a Jesús Aristu, de 87 años, sobrino de otro miembro de La Veleta en aquellos tiempos.

Argumentos de Asirón han sido que a) la Veleta dejó de existir con la Guerra Civil, b) que varios de sus miembros, además, fueron “represaliados e incluso fusilados” durante la Guerra Civil y c) que no hay representantes con vínculos más cercanos con la Peña. El problema es que las tres cosas que el alcalde da por seguras son, con seguridad, falsas.


La Veleta existe. La actual peña la Saeta, que es la antigua Veleta, “está viva, y es la peña-sociedad más antigua de Pamplona”, según recalca Juan Rived, miembro e historiador de La Veleta. El 30 de enero de este 2015, cumplieron 85 años, ya que como explica Rived “en 1942 debido a la ley de asociaciones, tuvieron que regularizarse y aprovecharon para cambiar el nombre a La Saeta. Los miembros de la junta y los socios, son los mismos, tanto en la Veleta como en La Saeta. El local es el mismo también, Jarauta 33”. Así que según reivindican La Veleta no desapareció “sólo cambió de nombre pero nunca dejó de existir”, como se ve en el propio símbolo de la Peña y en sus Estatutos.

La Veleta-Saeta no sufrió más que otros aquella guerra. Rived expone que este año el Chupinazo lo viven como otro cualquiera ya que “no nos parece bien que se use la memoria de La Veleta sin contar con nosotros”, los actuales miembros de esta peña, porque de este modo “parece que hemos desaparecido y no es así, estamos vivos”. El nuevo Ayuntamiento ha concedido el lanzamiento hablando explícitamente de “los miembros esta histórica peña que fueron fusilados durante el franquismo”. Pero el impacto de la violencia de aquella guerra no fue mayor para la Peña que para otros, salvo que se quiera manipular ideológicamente el pasado.

Y hay representantes más cercanos de la antigua Veleta. Nicanor Marco fue uno de los fundadores y el primer presidente de La Veleta, y tiene familia directa (hijo y nietos), que son en todo caso más cercanos representantes de aquella Veleta que un sobrino o nieta de socios ya fallecidos. Aparte de que podría nombrar a los representantes de La Saeta. Han hecho público su estupor ante la abierta mentira de la alcaldía.

6 de julio a las 12 horas, balcón de la Casa Consistorial. Asiron-Bildu-Batasuna, en ejercicio legal de los poderes de la alcaldía, han dado el chupinazo a quien han querido el “Autobús de la Memoria” y la Federación de Peñas. Para hacerlo, no sólo ha demostrado que no conoce su propia ciudad, sino que directamente se va a inventar lo que haga falta para manipularla. Y ahí está el problema. En que La Saeta (antes llamada La Veleta) no es una peña de las 16 controladas (en sentido abertzale) por la Federación de Peñas. Y en que se quería contar la historia de un San Fermín “antifranquista” contando una historia… que es mentira.

No hay comentarios:

Publicar un comentario