Por lo que podemos ir viendo estos días, parece ser que Pamplona ha entrado en la lista de ciudades más peligrosas del mundo, seguida de Caracas y de Acapulco, se han ampliado los efectivos de Policía Municipal para los fines de semana y la Policía Foral patrullará también por pueblos de la periferia como Burlada o Huarte, así dando apoyos a la policía local de estos municipios. Para más inri, el ayuntamiento de Pamplona ha propuesto una medida para intentar evitar las “agresiones machistas” de cara a San Fermín que consiste en la colaboración de mujeres para elaborar un mapa de puntos negros donde se sientan inseguras. La verdad que yo, mostrando un afectivo apoyo a España, me siento insegurx en toda la ciudad, pudiendo ser víctima tanto de violencia física como verbal.
Siendo una agresión sexual un hecho totalmente injustificable, ruin y digno de descerebrados, me gustaría analizar este tipo de iniciativas del ayuntamiento. Empezando por el hecho de definir las agresiones sexuales como agresiones machistas, siendo simples, una agresión es una agresión y cuando me acerco a un municipio próximo a Pamplona puedo leer: (Nombre del pueblo) condena las agresiones machistas/sexistas.
Como si de un estándar se tratase, los pueblos cercanos a Pamplona, en su mayoría, incluyen una señal así en su entrada. Leyendo estos mensajes objetivamente, me da a entender que estas localidades únicamente condenan las agresiones hechas por hombres hacia mujeres, cuando de lógica y sentido común es condenar TODO tipo de agresiones sean de índole político, de género, racial o cualquier otro tipo. Más de uno pensará que el resto de agresiones son una obviedad y por ello, hay que recordar a todo viandante que está mal abusar y/o agredir a una mujer.
¿Corrección política? ¿Politización de movimientos sociales? Un poco de los dos, aunque diría que lo segundo predomina. Está muy mal decir que hay una oleada de violaciones por parte de refugiados en diversos países de Europa, está muy mal decir que hay muchas agresiones y denuncias falsas, está mal que una mujer defienda al hombre y rechace la ley de ideología de género, está mal defender el valor de la familia, está mal ser heterosexual, está mal ser Español, está mal escribir este artículo lleno de basura fascista misógina.
¿Está mal condenar una agresión sexual? NO. ¿Está mal defender la figura de la mujer ante posibles maltratos? NO. La corrección política ha conseguido que movimientos sociales como la defensa de la mujer se vean contaminados por la más radical de las izquierdas y con iniciativas como las del ayuntamiento, sólo intentan generar miedo para obtener un beneficio político de ello. Lo cierto es que la movilización ciudadana con este tipo de agresiones es gigantesca, siendo alguna de estas confusa, como la sucedida en el Nafarroa Oinez del pasado año, hecho que el “Notizias” calificaba como “supuesta agresión”, calificación adherida porque entre abertzalismo jamás de los jamases habrá una agresión sexual a la mujer, porque son los únicos que se movilizan, siendo los agresores pertenecientes al colectivo ultraderechistaespañolista.
Siendo Pamplona una ciudad tan pequeña y segura (que yo sepa en Pamplona la tasa de asesinatos es nula), habría que pararse a analizar cada agresión sea del tipo que sea y analizar si realmente este tipo de iniciativas tienen sentido, porque puestos a pedir, me gustaría saber en qué zonas de la ciudad podrían lxs ciudadanxs de Pamplona ser atracadxs o agredidxs. Que yo sepa los jóvenes agredidos y robados mientras recibían amenazas de muerte con gritos exaltando a ETA no han recibido ningún tipo de apoyo en la calle, lo cual no quiere decir que no haya que condenar la violencia contra la mujer pero es una realidad que hasta este tipo de actos ciudadanos de sentido común están siendo contaminados políticamente, pasando por el punto de lo políticamente correcto, ya que a más de uno no le haría gracia saber qué tipo de gente comete estas agresiones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario