Muchos recordarán aquella entrañable imagen de un
Pedro Sánchez anunciando su candidatura a la Presidencia del Gobierno por parte
del PSOE para las elecciones generales
del 20 de diciembre de 2015. Muchos analistas comentaban aquellos días cómo el
PSOE dirigido por el malogrado Sánchez parecía sacudirse los viejos complejos
anti-españolistas de la izquierda española moderada (en teoría). Porque de la
izquierda más allá del PSOE mejor ni hablamos. También muchos de nuestros lectores
recordarán las dos elecciones generales consecutivas que hemos tenido que
padecer (20-D y 26-J), así como el intento de Rajoy de la gran coalición, el de
Sánchez con C´S y de nuevo el de Rajoy con C´S, con investiduras fallidas de
por medio.
Tal y como está la situación tras
las segundas elecciones, las que padecimos el 26-J, con el veto del PSOE al PP,
y el veto mutuo C´S y Potemos, solo quedaban dos opciones encima de la mesa; o
gobierno del PSOE-Potemos con el apoyo del bloque secesionista catalán (ERC y
la exCIU) o las terceras elecciones.
Todo apunta a que el Sánchez de la imagen, el que hizo su gran puesta en
escena con una gran enseña nacional de fondo, tenía (y todavía tiene) toda la
intención de apoyarse en la primera, es decir, en pillar sillón bajo la excusa
de echar a Rajoy a cambio de algún pacto espurio con los secesionistas bajo
manga (¿referéndum?). Por cierto, todo apunta a que dicha estrategia ni
siquiera la tenía consensuada con el partido, hasta el punto de acusarle el
28.09.2016 en prensa Felipe González de haberle mentido (cosa que me parece
gravísima y me lo creo, ya que Felipe está en otro mundo y no gana ni pierde
nada con estos berenjenales).
La situación interna y externa
del PSOE particularmente me importa un pepino y medio, pero para España es una
auténtica desgracia que no exista un partido de centro-izquierda y/o
social-demócrata que tenga un mínimo sentido de Estado y orgullo patrio, como
ocurre en los "países de nuestro entorno". Si bien por fortuna entre
los viejos dirigentes ayer tan amados y hoy tan criticados (González, Almunia,
Borrel, Corcuera, Leguina, Rodríguez Ibarra), como los conocidos como
"barones" críticos tienen un mínimo de sentido común, por desgracia
una militancia radicalizada y alineada con el embustero de Sánchez intentará
apoyar a quien, a su vez y valga la redundancia, pretende apoyarse en los
secesionistas (es decir, poder a cambio de la unidad de España).
En realidad el PSOE se encuentra
ante un problema existencial que va más allá de la pérdida de votos en favor de
Potemos. Los hasta ahora hegemónicos PP y PSOE tienen un problema, sobre todo
se está demostrando en el caso del segundo, y es que gobiernan de manera
social-liberal con un sometimiento completo al proyecto ultraliberal de la UE,
mientras esconden sus vergüenzas arengando a las masas. De hecho, durante las
dos legislaturas de Zapatero, pudimos apreciar medidas ultraliberales del PSOE
muy en la línea bruseliana (reforma normativa desahucios, modificación art 135
de la Constitución, reforma laboral, recorte salarial en el sector
público.....) mientras radicalizaba y
(todavía hoy sigue haciéndolo) a sus bases con la memoria histórica, la
ideología de género, la limpieza política de Batasuna o ciertas posiciones
esquizofrénicas con los separatistas gallegos, panvasquistas y pancatalanistas.
Y ya que estamos metidos en
harina, vamos a hablar un poco más del actual amado-líder del sector ultra del
PSOE, mezclado con una pequeña dosis de memoria histórica. El abuelito de
Sánchez (por parte de madre) fue nada menos que el General Antonio Castejón,
apodado por los "rojos" como el "carnicero de Badajoz", ya
que desde la izquierda se le atribuye una cierta responsabilidad en una
magnificada matanza de personas. Muchos argumentarán que nadie tiene por qué
cargar con responsabilidades ajenas, aunque sea de antepasados, y no les quito
la razón. Sin embargo, ocurre que la madre de Sánchez se crió en un entorno que
le dio unas oportunidades sociales, económicas y laborales muy superiores a las
de cualquier ciudadano normal, hecho que a su vez heredó nuestro pedrito.
De hecho, el bueno de Pedro
cuenta con el siguiente curriculum académico: "En 1990 comenzó a estudiar la licenciatura en Ciencias Económicas y
Empresariales en el Real Centro Universitario María Cristina en San
Lorenzo de El Escorial, un
prestigioso centro universitario privado adscrito a la Universidad
Complutense licenciándose en
1995.7 En 1993 se afilió al PSOE, tras la victoria de Felipe González en las elecciones de ese año.5 Realizó un máster en Política Económica de la Unión Europea por la Universidad
Libre de Bruselas (1997-1998) y
un Programa de Liderazgo para la Gestión Pública por la escuela de negocios IESE -
Universidad de Navarra.3 Habla junto al castellano, el francés y el inglés".
No hay comentarios:
Publicar un comentario